Regina es de Zimbabue y trabaja como Asesora de Capacitación en Medios de Comunicación en el área de VIH para la Asociación para la Juventud y el Desarrollo del Cuerno de Africa (Horn Youth and Development Association, HYDA) en Hargeisa, Somalilandia.
¿Cuál es tu formación / experiencia de trabajo?
Trabajé como Asesora de Información y Comunicación con MS Denmark en calidad de cooperante. Colaboré con dos contrapartes en este proyecto. Anteriormente fui Asesora de Programas para la Juventud en una organización dedicada a la incidencia, llamada Habubuk Trust, en Zimbabue. Mi labor principal era la de capacitarles en el área de la información. Me dediqué principalmente a capacitar el Departamento de Información en cómo difundir información, relacionarse con los medios, producir información, materiales educativos y de comunicación, así como de elevar el perfil de la organización. Era un trabajo muy similar al que hago con HYDA. Soy periodista titulada con una licenciatura en Ciencias de la Información. Ejercí el periodismo en medios impresos y electrónicos durante 16 años. Trabajo también para Mujeres de Africa, Africa Women, una página de internet patrocinada por el Consejo Británico. Dieciséis mujeres participaron de un piloto de esta proyecto desde cuatro países: Zimbabue, Uganda, Kenia y Ghana.
¿Qué te inspiró a convertirte en Cooperante de Progressio?
Mi trabajo en el mundo de las ONG comenzó en Médicos sin Fronteras España como Oficial de Información, Educación y Comunicación. Después solicité trabajar con MS Denmark donde supe de los cooperantes, un concepto que no conocía. Estaba vinculada con dos organizaciones cuando trabajaba para MS. La primera era Souls Comfort (una organización para la atención de enfermos de SIDA que se ocupaba de cuidar pacientes en sus casas) en la que colaboré como Asesora de Proyectos para Jóvenes. La segunda fue Habakkuk Trust (una organización orientada a la incidencia) en la que me desempeñé como Asesora de Información y Comunicaciones. Cuando descubrí el sitio de internet de Progressio, me di cuenta rápidamente que el enfoque de Progressio era similar a lo que yo había hecho anteriormente.
¿Es la vida en el país de tu convenio como imaginabas?
En realidad no tuve muchas sorpresas. Mis expectativas estaban a tono con la información que tenía sobre el país, aunque quizás vi más destrucción causada por la guerra de lo que esperaba, y tampoco pensé encontrar las carreteras en tan mal estado. Suponía que Hargeisa no era ni demasiado grande ni demasiado pequeña. Sin embargo, no me decepcioné. La forma de vestir me impactó un poco. Sé que las personas de culturas diferentes tienen forma de vestir diferentes. Los somalíes se sienten orgullosos de su cultura y objetan con firmeza lo que no les gusta. Ellos no lo dicen directamente pero te dejarán saber si no les gusta lo que llevas puesto. Yo no estaba vestida de forma apropiada. Desde que salí de Nairobi me di cuenta que yo era la rara. Todas las demás mujeres llevaban vestido largo. Sin embargo, me adapté bastante bien; la gente tiene ahora una buena opinión de mi forma de vestir.
¿Qué es lo que más le gusta de tu trabajo?
Hago lo que más me gusta. Me siento cómoda porque es lo que sé hacer. He hecho carrera en el sector de la comunicación. El único ligero desafío que tengo aquí es la puesta en práctica de algunos de los instrumentos de monitoreo y evaluación, es decir, cómo implementarlos. Las personas con las que trabajo están muy agradecidas de mi contribución y escuchan mis recomendaciones. También aprendo de ellos. Por ejemplo, di un cursillo de formación para los coordinadores regionales de HYDA. Los ayudé a mejorar la forma en que escriben las noticias. Sin embargo, descubrí que la metodología que empleaba no estaba funcionando. Por eso, después de la primera presentación, hicimos una pausa para tomar té y uno de mis colegas en HYDA sugirió algo diferente porque se había dado cuenta de que la metodología no funcionaba. De esta forma, los participantes se involucraron en el curso, permitiéndome llevarlo a cabo con éxito.
¿Cuál ha sido el momento más emocionante hasta ahora?
Para mí son las personas con las que me relaciono por mi trabajo. Puedo ver que mis planes se llevan a cabo con fluidez. Produje una serie de planes de trabajo trimestrales y es bueno ver que las cosas suceden en gran medida como lo esperaba. No suponía que funcionaran tan bien y rápidamente pero todo comienza a encajar; eso me emociona mucho. Muchas más cosas están saliendo bien. Por ejemplo, los esfuerzos para darle un mayor relieve a la organización y los cursos de formación. RICA (Estructura de Monitoreo y Evaluación de Progressio) fue un desafío para mí, pero en mi plan anual de trabajo me había propuesto establecer una línea de base. Belisario (Oficial de Calidad, Aprendizaje y Evaluación de Programas de Progressio) me proporcionó los instrumentos. Sin embargo, a la hora de poner los planes en práctica, el presupuesto era muy pequeño. Por eso tuve que reducir mis grupos de enfoque. No obstante, la valoración de capacidad de la contraparte y la línea de base se han llevado a cabo sin contratiempos.
¿Y la lección más grande?
Ser paciente. Puede ser bastante difícil acostumbrarse a otra cultura si tenemos la limitación del idioma, y los períodos de tiempo para realizar algo funcionan de forma diferente. Por ejemplo, puede ser frustrante cuando necesitamos mantener el sitio de internet actualizado para que los posibles donantes vean lo que HYDA hace. Además, hay formas de trabajar diferentes; por eso tenemos que atender también asuntos de desarrollo organizacional así como de medios y comunicación.
¿Qué es lo que más te impresiona del modelo de Cooperante de Progressio?
Hay más semejanzas que diferencias con el trabajo que realicé para MS Denmark.
Eso explica por qué quise hacer esto. Es una forma única de llevar el desarrollo a organizaciones comunitarias y contrapartes. La comunidad se beneficia de lo que aportas a la contraparte. Para el cooperante, se trata de un enriquecimiento en lo personal: se aprende la cultura, el idioma, las diferentes formas de vivir de los pueblos. Yo me siento como en casa. Me desarrolla. Eso es lo que tiene de bueno.
¿Qué consejo darías a alguien que está pensado en convertirse en Cooperante?
La tolerancia y la paciencia son las virtudes principales. La voluntad de escuchar y aprender. Escuchar permite hacer las cosas de la forma correcta. Si no escuchas, no sabrás las razones por las que te recomiendan no hacer las cosas de una forma particular. Yo indago profundamente para saber por qué las cosas son como son; después me replanteo mi estrategia. Esto implica quizás hacer algo juntos; así ellos se comprometen más.
¿Dónde te imaginas que vas a estar cuando se termine tu convenio de Cooperante?
Me gustaría seguir trabajando para el desarrollo en África.
¿Hay algo más que le gustaría compartir?
No hay duda de que trabajar para el desarrollo es emocionante. Lo que varía es cómo lo haces, dependiendo del tipo de persona que eres. No tienes que alejarte de tu país para hacerlo bien. Lo que importa es cómo te relacionas con otras personas, en lo que crees, cómo te comprometes con el tipo de trabajo que quieres hacer. Todo eso cuenta. Primero que nada, necesitas comprometerte. En segundo lugar, hay que tener la voluntad de aprender de la gente con la que vas a trabajar. He visto que hay personas que se sienten frustradas porque tienen sus propias ideas y la situación no les permite hacer las cosas tal como habían planeado. En el proceso de aprendizaje de las personas, se te ocurren formas alternativas de realizar el trabajo para el desarrollo. No juzgues: te puedes llevar una sorpresa al darte cuenta de que las personas con las que trabajas no son como esperabas.