Participantes en un taller de género en VIH.
¿Cuál es tu formación/experiencia de trabajo?
Yo soy enfermera, y siempre que tengo ocasión estoy feliz de decirlo, ya que me gusta mucho lo que hago. Antes de ser cooperante he trabajado en diversos hospitales y diversas áreas; y decidí hacer un cambio personal y laboral, así que aposte por este puesto de trabajo en educación sanitaria.
¿Cómo te describes?
Alegre, humana, soñadora y cabezota, me mete de lleno en lo que me gusta y me apasiono con lo que hago, y hasta que no salga... no paro. Me considero familiar y valoro la amistad por encima de todo. Trato de ser consecuente con mis actos, por eso me gustan los trabajos que promuevan la justicia la igualdad y el apoyo. Me encanta viajar y este trabajo además de todo esto me permite disfrutar de los bellísimos paisajes y culturas de esta región de Centro América, ¿qué más se puede pedir?
¿Que te animó/inspiró a postular como cooperante para Progressio?
Un cambio en mi vida personal me animó a trabajar de otra forma la enfermería, un amigo me dio el enlace sabiendo de mi propuesta y proceso personal y me encantó el trabajo y la idea del cambio; así que me dediqué para que me saliera, y aquí estoy ahora, feliz!.
¿Qué te impacto más del país de tu convenio? ¿Vivir en el país de tu convenio es como esperaste/ imaginaste?
Yo ya había venido a El Salvador, y mi primera impresión fue nada más bajar del avión, ese calor húmedo y un olor que no puedo describir; luego el recibimiento de Carmen Medina, (la representante del país), fue tan cálido humano y acogedor que quedé tranquila de cualquier cosa.
La verdad es que gracias a las personas que estaban cooperando en el país, te ayuda a darle un giro a los prejuicios que se ven en las noticias de la violencia, de las maras y de la inseguridad. Cuando sales a la calle y ves las alambradas y los vigilantes con escopetas enorme es una sensación paralizante indescriptible, “donde me he metido yo” pensé; pero como digo la acogida y experiencia de las y los compañeros hizo que todo sea fácil.
Menos mal que ahora lo que veo es un pueblo maravilloso, que lucha y trabaja por su progreso, unos paisajes de impresión y una comida que no solo alimenta el cuerpo, sino además el alma.
¿Qué disfrutas/te gusta más de tu rol?
Todo lo que estoy aprendiendo y como mi experiencia aquí me está aportando a ese proceso personal por el que me vine, no podía haber encontrado un lugar mejor para ello. El trabajo en equipo con Flor de Piedra y mis salidas a campo, que aunque son escasas me hacen aterrizar en la realidad, cuando me veo inmersa en miles de trabajos tediosos de ordenador.
Cuando una persona con la que has trabajado te hace una valoración positiva, se siente satisfacción y un gusanillo más bien emotivo de saber que hay gente a la que le puedes aportar tanto como ellas te aportan a ti. Es muy gratificante.
¿Cuál ha sido el momento más emocionante hasta ahora?
No sabría decir, me pasa a menudo que en el grupo de apoyo de Flor de Piedra, de personas viviendo con VIH, y cuando hablo con compañeras trabajadoras del sexo, que me cuentan sus vidas, y comparten sus miedos e ilusiones…
El año pasado entregamos públicamente una publicación con el proyecto conjunto con el Centro Bartolomé de las Casas, Fundación para el Desarrollo Juvenil Contrasida y Flor de Piedra, con cooperantes de Progressio en cada una de ellas, y era la primera vez que se me dio la oportunidad de publicar un escrito y un trabajo; y la verdad es que fue muy bonito y muy emocionante.
¿Y la lección más importante?
Aprender, siempre, tener la mente abierta para lo que pueda venir. Saber que estamos en un proceso de vida que te puede llevar a ser mejor persona cada día y con la alegría de poder compartirlo con más personas.
¿Cuál es el reto más grande que se presenta en el sector/área temática en la que trabajas dentro del país donde estás trabajando?
Me gusta que me hagan esa pregunta, uno de los retos sería mantener el área de trabajo en relación a VIH, ya que queda mucho por hacer y Progressio se está retirando hacia la gobernabilidad, (donde creo hay más cabida para VIH).
Trabajar con el VIH es trabajar para acortar las diferencias desigualdades e injusticias que se dan, teniendo como máximo reto deconstruir el patriarcado, eso es un trabajo de nunca acabar.
El reto sería poder trabajar más conjuntamente con otros procesos de Centro América para aprender y aunar esfuerzos en el proceso de despatriarcalización.
¿Si pudieras cambiar algo, que sería?
Tener más tiempo de calidad para todo lo que quiero hacer; como dice Mafalda: “Como siempre, lo urgente no deja tiempo para lo importante”.
¿Qué te impacta más sobre el modelo de cooperante de Progressio?
Que brinda la posibilidad de grandes intercambios de experiencias y conocimientos y si fuera con más países, seria todavía más exitoso. Lo bueno de Progressio es su forma de cooperación, pues le da importancia al apoyo técnico, que apunta además hacia la interculturalidad y el entendimiento.
¿Cuál es tu lema o refrán favorito?
Uy me quedo en blanco; cada frase tiene su momento, soy fan de Mafalda y Libertad, y siempre encuentro cómo mentarlas en mis talleres.
Podría decir: “Las cadenas de la esclavitud solamente atan las manos: es la mente lo que nos hace libres o esclavos” de Franz Grillparzer, ya que me recuerda que todo lo que vivimos es un proceso de liberalización y de cambios, y no perder la ilusión por trabajar cambiar y crecer junto con el resto de personas que me rodean.
Jajajaja y siempre me gusta despedirme diciendo: “mañana más y mejor”.
¿Qué consejo daría a alguien que está pensado en postularse como cooperante?
Que venga con la mente en blanco, es más fácil crecer de esta forma, estar abierta o abierto a lo quela vida te brinda aquí que es una oportunidad grande y estupenda.
¿Dónde te imaginas que vas a estar cuando se termine tu convenio de cooperante? ¿Y en qué maneras éste convenio de Progressio te ayudará?
Ni idea, no me lo he planteado, me imagino en casa de nuevo, tratando de contar mis experiencias allá y aplicarlo a mi día a día, y como soy un poco nerviosa buscando nuevos horizontes. Lo que sé es que volveré diferente y eso me ayudará en los siguientes proyectos de vida que me plantee.
¿Hay algo más que te gustaría añadir?
Nada más, gracias por la oportunidad de trabajar en la casa Progressio, y que es un placer trabajar en El Salvador.
Con cariño desde El Salvador.
Virginia López Tito